Fuente:
Tito Macia, Ejemplos Pablo Piñero
Existen otros armónicos menos comunes pero
al igual que los anteriormente expuestos nos dan una valiosísima información a
la hora del análisis astrológico.
El armónico 13 nos habla de los finales de asuntos, de rupturas que nos
reorientan en la vida, la muerte y
resurrección, el ave fénix que nace de sus cenizas.
El armónico 15 está relacionado con el apasionamiento, el romanticismo, el
enamoramiento físico, mental, emocional y/o espiritual por algo que nos “mueve
el piso”.
El armónico 16 encierra todos los aspectos tensos, las oposiciones,
cuadraturas, semicuadraturas y sesquicuadraturas. Se relaciona a los periodos
de altas crisis en lo físico, en lo mental, emocional y espiritual Son los
grandes asuntos que nos perturban el ordenamiento de la vida.
El armónico 24, es más benévolo, se trata de las inversiones, de la obtención
de recursos, de la pluralidad de los fondos
de dinero y los flujos de caja.
El armónico 25, lo relacionamos con los compromisos, con el matrimonio, con los
convenios de larga duración o contratos de convicción. Ataduras que se
presentan y las acepto con gusto.
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